Samtosha

Del libro Kaito de Hans Kruppa:

"Un buscador de la sabiduría halló tras largos años de búsqueda infructuosa aun hombre, del que mucha gente decía que era un sabio. Fue a él y le pidió audiencia. El sabio se la concedió con una sonrisa. El buscador se sentó y le miró a los ojos. De repente, todas las preguntas que quería hacer al sabio le parecieron banales; pero éste se echó a reír y el buscador se sintió ridículo.

-¿Te ríes de mí?- preguntó confundido.

El sabio seguía riéndose cada vez más alto. El buscador empezó a dudar de repente si aquél era de verdad un sabio. Así pues decidió probarle con una pregunta.

-¿No es verdad que lo bueno es el peor enemigo de lo mejor? Porque con frecuencia nos aferramos con miedo a lo bueno, a lo que se ha demostrado eficaz, coartando así nuestro valor y nuestra fuerza para buscar de manera decidida lo mejor.

El sabio asintió.

-Y acaso, ¿no es menos verdad que lo mejor es a su vez el peor enemigo de lo mejor de lo mejor, porque nos hace estar tan contentos que no anhelamos lo mejor de lo mejor, es decir, la perfección?

El sabio asintió de nuevo repetidas veces.

-Yo siempre he buscado lo mejor de lo mejor -confesó el buscador-, desde el mismo día en que comenzó mi búsqueda. he encontrado muchas cosas buenas en otros hombres; han surgido entre ellos y yo y también en mí mismo. Sin embargo, las he dejado atrás; he continuado y he encontrado algo mejor. Estaba contento y a veces pensaba incluso que era feliz. No obstante, mi deseo de lo mejor de todo, de lo insuperable, me hizo seguir buscando. En mi camino dejé atrás corazones tristes, incluso mi propio corazón se puso triste.

El sabio asintió.

-Mucha gente dice que eres un hombre sabio. Si es así, dime si existe lo mejor de lo mejor, la perfección; si se la puede alcanzar o si se parece al horizonte, que siempre se aleja del caminante cuando éste cree ya poderlo alacanzar. Y es que si lo mejor de lo mejor es inalcanzable, ¿no sería más conveniente que nos conformáramos con lo bueno y lo mejor?

El sabio negó con la cabeza y respondió:

-Conténtate con aquello que te proporciona contento. Sé feliz con lo que te hace feliz. Pero no pierdas la esperanza de encontrar lo mejor de lo mejor. existe, y cuando lo conozcas, lo sabrás sin dudarlo ni un momento. Y es que la perfección te proporciona una clara visión del corazón de la vida. Mientras anheles lo mejor de lo mejor, deberás buscarlo.

El buscador de la sabidurá dio las gracias por la respuesta, se inclinó con sumo cuidado para despedirse y se alejó del sabio con el corazón iluminado".